Los Reyes Magos de Oriente es el nombre por el que la tradición cristiana denomina a los «magos» —denominación que recibían los sacerdotes eruditos en el Antiguo Oriente que, tras el nacimiento de Jesús de Nazareth, acudieron desde Oriente para rendirle homenaje y entregarle regalos de gran riqueza simbólica: oro, incienso y mirra.
En la mitología romana Mercurio era el mensajero de los dioses, conocido por su velocidad y rapidez. Mercurio era un importante dios del comercio y su nombre está relacionado con la palabra latina merx (‘mercancía’). En la mitología griega, Hermes era hijo de Zeus y Maya y desde niño fue inquieto y aventurero.
En sus primeras horas de vida, se escapó de su cuna, fue a Pieria y se llevó algunos de los bueyes de Apolo. Para no ser descubierto por los rastros de sus pasos, Hermes se puso unas sandalias y condujo a los bueyes a Pilos, donde mató a dos y encerró el resto en una cueva. Tras esto volvió inmediatamente a Cilene, donde encontró una tortuga a la puerta de su cueva natal. Hermes tomó el caparazón del animal, tensó cuerdas a su través e inventó así la lira.
Apolo, gracias a su poder profético, descubrió que fue Hermes quien robó parte de su ganado y fue a Cilene a acusarlo con su madre Maya. Ésta, mostró al dios el niño en su cuna pero Apolo llevó al niño ante Zeus y exigió la devolución de sus bueyes.
Zeus le ordenó que cumpliese con las demandas de Apolo, pero Hermes negó haber robado el ganado. Sin embargo, como vio que sus afirmaciones no eran creídas, condujo a Apolo hasta Pilos y le devolvió sus bueyes, pero cuando Apolo oyó los sonidos de la lira quedó tan encantado que permitió a Hermes quedarse los animales.
Apolo obsequió a su joven amigo su propia vara dorada de pastor, enseñándole el arte de profetizar por medio de los dados y Zeus lo hizo heraldo suyo y también de los dioses del mundo inferior.
Mercurio era representado por los antiguos bajo una gran variedad de formas, pero la más común era bajo la figura de un joven desnudo, apoyado sobre la punta de su pie, con el petasus o sombrero con alas en la cabeza y a los pies las sandalias igualmente con alas, en una mano el caduceo y en la otra una bolsa.
Lo más destacado en el año 2018 es el ingreso de Urano al signo de Tauro en el mes de mayo, después de haber estado 7 años en Aries. Es un ingreso rápido y con retrogradación a Aries de nuevo en el mes de noviembre 2018. Lo que viene es la revolución monetaria, las criptomonedas en general, el papel moneda tiende a desaparecer, es el momento de los bitcoin. A partir del 2019 el cambio será aún más radical, la economía se manejará de una manera distinta, más globalizada. Urano rompe las fronteras que aún quedan en materia económica y financiera. Es el fin del papel moneda.
En el 2018 también retrogradarán Venus y Marte con sus respectivas energías. Por supuesto Mercurio como es habitual cada año, lo único peculiar es que este año esas tres retrogradaciones ocurrirán en signos de fuego, por lo que el mensaje es pensar antes de hablar.
Por su parte, Marte retrogradará en el signo de Acuario que es el signo de los ideales y lo que haremos será defender esos ideales con mucha energía. Marte se asocia con la acción y es agresivo, pero su presencia en un signo de Aire como lo es Acuario, más bien nos lleva a pensar en ideas futuristas y estrategias para lograr ideales. La idea es usar esa energía marcial para lograr poner en práctica las grandes ideas.
Venus retrogradará en el signo de Escorpio donde no se encuentra bien y nos habla de limpiar aquellos afectos que no nos aportan, eliminar las relaciones tóxicas, sean de la familia o amorosas, a salir de las relaciones que se vencieron, que tienen fecha de caducidad. Es el momento de terminar aquellos amores que ya no dan más, limpieza y más limpieza para luego poder salir a la luz renacido y renovado en el amor.
Júpiter está transitando el signo de Escorpio desde octubre del 2017 y lo hará hasta finales de año. Júpiter en Escorpio apoya el crecimiento del dinero compartido, es bueno para las empresas de seguros, para la banca en general, hay un incremento importante de la sexualidad y de romper los tabúes sexuales, aumentarán los programas de sexo, los cursos de sexualidad.
A partir del 8 de noviembre del 2018 Júpiter hará su ingreso al signo de Sagitario, donde se siente cómodo porque es su regente, es decir, llegará a su casa. En ese período se amplificarán las oportunidades para estudiar en la universidad, para hacer viajes al extranjero, para aprender nuevos idiomas y el 2019 será el año de abrir fronteras de todo tipo.
Saturno entró a Capricornio el 20 de diciembre del 2017 y llegó a su casa. Entra a poner orden y a reconstruir las estructuras que ha ido destruyendo Plutón desde el año 2008… Se imponen las nuevas construcciones de todo tipo, nuevas leyes, nuevas normas, nuevas figuras de autoridad, las leyes se hacen de acuerdo al momento actual y permanecerán en el tiempo porque Saturno da estabilidad. Vendrán cambios en los sistemas de pensiones.
Neptuno por su lado sigue en el signo de Piscis donde ha permanecido desde el año 2012, nos conecta con la espiritualidad, con la compasión, con el bien común, con la ayuda al prójimo, también hay tendencia a epidemias globales, a inundaciones de todo tipo, todos los eventos que tengan que ver con el agua. Salen a la luz las cosas ocultas y más si se tiene el apoyo de Júpiter en un signo de agua como lo es Escorpio. Es el momento en que grandes estafas salen a la luz, de grandes corporaciones, del mundo marítimo. A fin de año cuando Júpiter ingrese a Sagitario nos enteraremos de muchas más cosas relacionadas con estafas que estaban ocultas, es como si se cayera un velo, los casos de corrupción a la orden del día.
María Argelia Jaspe
Astróloga