En el mes de mayo hay mucho movimiento con varias retrogradaciones. Ya Plutón se adelantó poniéndose retrógrado a finales de abril de lo cual ya escribí la semana pasada. Ahora le toca el turno a Saturno el día 11 de mayo que desde el grado 1,57 de Acuario comenzará su movimiento hacia atrás y llegará a Capricornio de nuevo para el mes de julio y acompañará unos meses a Plutón en ese signo y ya el 29 de septiembre se pondrá directo en Capricornio para ya a finales de año ingresar al signo de Acuario por un lapso de dos años y medio y acompañado de Júpiter, dará lugar a un nuevo ciclo Katun de 20 años, pero no nos adelantemos que eso da para un escrito completo.
El día 13 de mayo será Venus el que comienza su fase de retrogradación que durará hasta el 25 de junio. Considerado el planeta del amor y transitando por el signo de Géminis, nos invita a relajarnos en las relaciones, a atrevernos a hacer alguna travesura amorosa, a conectar por internet en busca de ese amor que nos está esperando en algún lugar del planeta, a probar algo diferente y salir de la rutina. Venus en el signo de los gemelos nos lleva a relacionarnos con muchas personas, a querer comunicarnos, a ser creativos en la manera de expresar los afectos y la pasada luna en Escorpio de hace dos días, seguro que alteró las emociones de muchas personas y dejo volar la imaginación de las pasiones mas intensas a pesar del confinamiento que vivimos. Hay que aprovechar para canalizar esa energía hacia nuevos comienzos y reinvenciones, sin duda la creatividad es infinita.
El 15 de mayo será Júpiter quién se pondrá retrógrado en el signo de Capricornio hasta el 13 de septiembre. Eso significa que en los meses de junio a diciembre coincidirán en el cielo en Capricornio Júpiter, Saturno y Plutón por última vez hasta un próximo ciclo dentro de 240 años. Sin duda alguna, estamos ante un cambio de elemento y somos protagonistas de transformaciones y cambios de paradigma para la humanidad como nunca antes lo habíamos vivido. Para bien o para mal estamos siendo testigos de ese cambio, de esa transición, por eso este 2020 es un año bisagra.
En los períodos de retrogradación se dice que la energía esta implotada, es decir, hacia adentro y que es en nuestro interior donde buscamos y encontramos las respuestas, por lo que en los meses venideros nos tocará ir corrigiendo lo que no está bien hecho, quizás algunos recriminarán o pedirán cuentas, otras personas vivirán un luto por lo que perdieron, otros se liberarán de situaciones, lo que es seguro es que nos hemos transformado.
Finalmente, Marte ingresa en el signo de Piscis el 13 de mayo, y eso ayudará a suavizar un poco el ambiente rígido y exigido que hemos tenido los últimos tiempos. Otra interpretación pudiera ser una mayor permisividad y acciones poco claras, contradictorias, hacer y deshacer, sobre todo en el área política. Insisto en que muchas situaciones ocultas y hasta fraudulentas saldrán a la luz y Saturno en su último paso por Capricornio le pondrá orden y disciplina, aplicará la justicia. Esperaremos y veremos la astrología en su evolución. La astrología es perfecta, los imperfectos somos los astrólogos.
María Argelia Jaspe Álvarez
Astróloga
Málaga, mayo de 2020